TROTAMUNDOS

jueves, 1 de agosto de 2013

ABDUCIDA!!





El verano hacia días que había terminado y el hermoso  otoño estaba empezando a hacerse sentir.  
A si estaba yo, receptiva a todo lo que pasaba a mi alrededor.  Había sido un día duro de mucho trabajo, pero a pesar de todo quise  volver a casa dando un paseo, disfrutando de esos nuevos aromas y colores que  se estaban apoderando de la ciudad.

Un cartel pegado a un cristal  llamo mi atención, me acerque, me quede mirándolo y  ya nada volvió a ser igual. Una luz cegadora salió quien sabe de dónde y me llevo muy  lejos, pasado presente y futuro desfilaron en mi cabeza a velocidades supersónicas. No sentí miedo, todo lo contrario, una gran alegría empezaba a recorrerme. Mi cuerpo se negaba a moverse, o es que no podía?. Mientras mi  mente corría una loca carrera sin poder controlarla... Me deje llevar sin poner resistencia. Y empecé a realizar todos los pasos que el cartel tenia escritos.

Envuelta en esa luz, con  mi mente abstraída comencé a caminar sin saber muy bien a donde, atravesé la ciudad hasta llegar a una enorme nave que estaba a las afueras y allí me di cuenta de que no estaba sola, que había mas gente como yo. Todos juntos en silencio entramos en una gran sala, apenas se oían susurros, los pasos eran indecisos, apuntaban todos en la misma dirección, como autómatas, con la mirada baja, nadie se atrevía a mirar a su alrededor. De pronto al final de la sala aparecieron unas figuras muy parecidas a nosotros, nos fueron colocando en distintos sitios y comenzaron a hablar. 

Al principio les entendía todo pero enseguida deje de hacerlo. Mi cabeza comenzó a llenarse de extrañas palabras, palabras que no había oído nunca y  que luchaba por ponerlas en orden en mi mente, sin conseguirlo. Eran  palabras fuertes :ISO, exif, balance de blancos,  diafragma, F, nanómetros, temperatura del color, obturador, pentaprisma, RAW, fotómetro, visor, rango focal, gran angular, ojo de pez, profundidad de campo, AF, modo bulb, y muchas más.

Todas iban entrando a gran velocidad e intentando encontrar un huequecito donde colocarse, pero no había manera, el caos era total, chocaban unas con otras sin saber dónde ponerse y lejos de estar contenta mi confusión se acrecentó y la decepción se apodero de mi. Quise irme, pero no podía, la puerta estaba muy lejos y estoy segura de que antes de que llegara a ella esos "seres" me lo impedirían, eran muchos y estaban por todas partes. Cuando les miraba detenidamente, influían en mi una fuerza hipnótica  tan fuerte que era incapaz de rechazarles. En las sucesivas horas o días, quizás semanas, perdí  el control del tiempo intentando organizar toda esa información pero era tanta que no lo conseguí. Esos "seres" estuvieron hablando sin parar durante horas y días y aun sigo oyéndoles de vez en cuando, incluso creo que hasta puedo verlos alguna vez.
 Fueron muy amables, a pesar de todo  lo que dice la gente que son ...

 Un buen día nos dijeron adiós, igual que llegaron se fueron. Desparecieron del fondo de la sala y nosotros volvimos a salir por donde entramos. Solo unos pocos quisimos quedarnos y ellos nos acogieron con la mejor de sus sonrisas y con una eterna paciencia.

 Aunque lo cierto es que ya nada era igual. Habían plantado una semilla en mi cabeza que ya estaba empezando a crecer, a mi mano le había salido un bulto extraño, negro, de unos 700 gramos del cual me advirtieron que con el tiempo iría creciendo. Digo extraño porque se puede ver a través de el, y cuando te acostumbras a mirar ya nada te parece igual. La vida te cambia!

Un buen día empecé a ordenar todas esas palabras que flotaban en mi cabeza las que ellos me inyectaron y poco a poco estoy consiguiendo poner orden ahí dentro. Tengo poco tiempo, todos lo tenemos, a si que tuve que decidir entre este mundo desde el que me leéis o ese otro nuevo que había descubierto y al que desde muy joven siempre quise acceder. 

Aun sigo abducida y peleando por que el orden de mi cabeza pase a mi ojo , después a ese bulto extraño de mi mano y por fin se convierta en un instante eterno.
Pero a pesar de todo, no os he olvidado ni un solo día. Espero y quiero volver por aquí y por vuestras casas de vez en cuando, sin prisa pero no con tanta pausa. Tener paciencia conmigo...


Si vecinos, como ya habréis deducido, he sido abducida por la fotografía. Una pasión que siempre ha estado ahí y que por circunstancias nunca pude aprender. Ahora lo estoy consiguiendo poco a poco. Me lleva mucho tiempo, todo el que puedo se lo dedico, tengo mucha ansia y mucha ilusión por aprender. Uno de mis sueños se está haciendo realidad.
Estoy bien, gracias a todos los que os habéis preocupado por mi durante estos meses. Creo que os debía una explicación. Aun no me he ido, el día que lo haga me despediré.


-”¿Cuál de mis fotos es mi fotografía preferida? Una que voy a hacer mañana.”
Imogen Cunningham


-”Tus primeras 10.000 fotografías serán tus peores fotografías.”
Henri Cartier-Bresson